Las autoridades de Costa Rica tras cinco meses de cierre total de sus fronteras, decidieron reabrir sus límites aéreos para tratar de levantar su economía a través del turismo internacional, que se ha visto afectada debido a las medidas restrictivas impuestas por el gobierno del país centroamericano ante la COVID-19.
Más de 200 pasajeros arribaron a suelo costarricense procedentes de España, donde los tripulantes tuvieron que presentar una negativa de Covid-19 con 72 horas de anticipo y un seguro de salud que cubra ante posibles contagios.