El ancestral cultivo del cacao, emerge de las tierras fértiles de Nicaragua, dando vida a un sinfín de exquisitos sabores, entre ellos: el chocolate. El país centroamericano, produce uno de los mejores cacaos y chocolates del mundo, contando con tecnología, emprendimientos y altas capacidades técnicas e institucionales.
Nicaragua, con su producción de cacao y elaboración de chocolate, ha destacado a nivel mundial en diferentes concursos, entre ellos: el Certamen International Chocolate Awards; Certamen Programa Cocoa of Excellence; premio Organización Internacional de Cocoa, entre otros premios, obteniendo diferentes nominaciones, medallas y rankings.
Familias del municipio de Siuna, en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte, le han apostado al cacao, ampliando sus cadenas de producción. Fermín Estrada, miembro de la cooperativa CopeSiuna R.L., nos explica, cómo a través del cooperativismo, han logrado a lo largo de 23 años, desarrollar este increíble rubro.
El cacao, patrimonio cultural de Nicaragua
Este productor de la comunidad “El Hormiguero”, detalla que la producción del cacao, en estas tierras de Siuna, ha logrado sacar adelante a muchas familias, que actualmente se han tecnificado en este cultivo que forma parte de su patrimonio cultural.
No ha sido tarea fácil, pero los productores locales, haciendo alianzas con la cooperativa CopeSiuna, han logrado que esta comunidad, con el pasar del tiempo, sea reconocida como territorio cacaotero; además de ser una zona ganadera y que siembra granos básicos.
“Es con el triunfo del Buen Gobierno (Sandinista) que prácticamente las cosas cambian. Para el 2009, comenzó a sentirse el calor institucional, porque fue así donde nosotros nos fuimos expandiendo”, sostuvo el productor.
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En este sentido, asegura que la asesoría del Ministerio de Economía Familiar Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (Mefcca), ha sido clave; y esto ha llenado de mucho entusiasmo a las familias que siembran cacao, quienes, además de cultivar el grano, han aprendido a exportar sus productos a precios justos, en el mercado internacional.
“Para el 2018-2019, nosotros ya pasábamos de las 34 a 60, 84 toneladas entregadas. Yo comencé con unos poquitos palos”, recuerda Fermín, sus inicios en este rubro, añadiendo que actualmente está mercadeando hasta 400 quintales de cacao.
Cooperativas con producción sostenible del cacao
En la medida que CopeSiuna crece, hay mayor inversión y un mayor desarrollo para todos sus socios cooperativistas; suscitándose un buen momento productivo y de mercado, gracias también a la implementación de los programas Procacao y Nicadapta.
“A mí me ha gustado lo del cacao, porque es un dinero que está ahí adicional, es como un dinerito escondido que cada quince días usted lo saca”, dice entre risas, este productor local, quien asegura que, con los ingresos por producción, ha logrado darles alimentación y estudios a sus hijos.
El Castillo del Cacao y el riquísimo chocolate vegano
Pero de la semilla del cacao, se genera la producción del riquísimo chocolate. Y uno de los mejores chocolates artesanales, lo producen en “El Castillo del Cacao”, en Matagalpa. Aquí nos encontramos con Cynthia Tapia, quien administra este ingenioso emprendimiento, el cual tiene sus inicios en 2005, y cuyos dueños son dos holandeses y un chileno.
Este emprendimiento, “inició con la finalidad de comprar cacao y transformarlo en chocolate natural, sin químicos, preservantes o aditivos”, nos explica Cynthia, quien, a su vez, detalla que este local, produce exquisitos sabores de chocolates, entre estos: el amargo; chocolate con cacao de origen Matiguás; chocolate con cacao en trozos; chocolate con cacao y granos de café tostado; y hasta chocolate con simillas de marañón.
La jefa de producción, Luz Marina, es la encargada de todo el proceso, para convertir las semillas de cacao en chocolate. Y nos remonta en la historia, cuando el cacao se utilizaba como moneda de intercambio; pero, además, enfatiza que para ella “representa un alimento altamente nutritivo, y un deleite al paladar”.
Un chocolate orgánico, fineza y sabor de talla mundial
Por su parte, Cynthia nos explica que El Castillo del Cacao, ha contado, en diferentes momentos de su crecimiento como empresa, con el apoyo de instituciones del Gobierno de Nicaragua, y esto ha facilitado que puedan colocar a nivel nacional e internacional, sus productos, cumpliendo con todas las normativas de comercio.
“Este mundo del chocolate es nuevo, porque a veces consumimos lo importado, pero no lo nacional. Por eso los invitaría, para que conozcan cómo se elabora, para que sepan que el grano de cacao nicaragüense tiene un gran valor”, sostuvo la administradora del local, explicando, además, que “este es un producto que cuida mucho la salud de sus clientes”.
