Miles de trabajadores encabezaron recientemente nuevas protestas en Francia, contra el aumento del costo de la vida. Durante las movilizaciones, los ciudadanos también hicieron un reclamo por mejores salarios al Gobierno del presidente, Emmanuel Macron.
Los manifestantes criticaron a Macron, por realizar un envío de armamento y equipo militar a Ucrania, mientras la ciudadanía se hunde por los elevados precios de los productos y servicios, ante el golpe económico generado por la inflación.
Al menos unas 107 mil personas salieron a las calles para protestar contra el Gobierno Central. Sin embargo, las marchas fueron repelidas por agentes policiales, quienes recetaron golpes a mujeres, estudiantes, periodistas y ancianos.
La multitudinaria protesta, fue vapuleada por las fuerzas del orden, quienes además les rociaron gas pimienta, recrudeciendo aún más la violencia en varios puntos de ese país.
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Sumado a estos hechos, los sindicatos de las refinerías de Esso-ExxonMobily TotalEnergies, se han sumado a la huelga nacional. Las manifestaciones han generado el desabastecimiento de combustible, conllevando a una escasez en al menos 30 % de las gasolineras del país.
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La situación económica en Francia, no pinta nada bien. La Inflación Interanual, hasta septiembre de 2022, se estima en 5,6 %, derivando en un aumento en los precios de la energía de hasta un 18 %.
