La FIFA suspende por 90 días al presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, y le prohíbe contactar a la jugadora, Jenny Hermoso, tras la controversia del beso señalado de no consentido, en la Final de la Copa Mundial Femenina.
La suspensión inicial fue efectuada bajo el artículo 51 de la Comisión Disciplinaria de la Federación Internacional de Fútbol Asociaciones (FIFA), por lo que Rubiales queda inhabilitado, hasta que se finalicen los parámetros disciplinarios, de “toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional”.
Rubiales no puede acercarse a Jenny Hermoso
En ese contexto, el presidente de la Comisión Disciplinaria de la máxima institución del fútbol en el mundo, Jorge Iván Palacio, que mandata a Rubiales y a todo funcionario de la Federación que se abstengan de intentar contactar a Jenni Hermoso o a personas allegadas a la misma.
La RFEF emitió un comunicado al respecto en el que detalla que el vicepresidente adjunto, Pedro Rocha, asumirá la presidencia de esa institución deportiva española.
Luis Rubiales se defenderá legalmente
Además en el documento público, detalla que “Luis Rubiales ha manifestado que se defenderá legalmente en los órganos competentes, confía plenamente en las instancias de la FIFA y reitera que, de esta manera, se le da la oportunidad de comenzar su defensa para que prevalezca la verdad y se demuestre su completa inocencia”.
Las acciones dispuestas por el Comité Disciplinario de la FIFA fueron comunicadas a todas las instituciones deportivas implicadas, incluyendo a la UEFA, con el objetivo que se cumplan a cabalidad. Además, el ente internacional, reafirmó su “su compromiso absoluto con el respeto a la integridad de todas las personas y por lo mismo condena con el mayor vigor todo comportamiento en contrario”.
Previamente a la suspensión, la FIFA detalló que el acto de besar en la boca a una jugadora sin su consentimiento; y la realización de gestos obscenos en el palco de premiación (de lo que también se acusa a Rubiales), podrían constituir “violaciones de los artículos 13.1 y 13.2 del Código Disciplinario” de la Federación.
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Distintas jugadoras del primer equipo femenino del FC Barcelona desaprobaron en redes sociales la decisión de Rubiales de no renunciar. El club publicó un comunicado describiendo la acción del implicado como “impropia y desafortunada”.
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El incidente tuvo lugar en la ceremonia de entrega de trofeos y medallas, después del triunfo 1-0 del equipo español sobre Inglaterra en Sydney, Australia.
