Un bloque de países africanos desafía el legado colonial francés, en una historia que cuestiona las narrativas occidentales sobre Níger, Burkina Faso y Malí.
La caída del presidente nigerino, Mohamed Bazoum, a manos de soldados locales no provocó protestas, sino celebraciones. La tensión escaló cuando otros ejércitos con influencia francesa amenazaron con invadir Níger. En este sentido, Francia tiene un profundo vínculo con esta región africana, donde el Franco CFA, impuesto por Francia a 14 naciones africanas, actúa como corazón económico y político.
Dicha moneda, ha sido una herramienta de control financiero desde 1930. Francia introdujo esta divisa en sus colonias africanas, respondiendo con dureza a cualquier intento de rechazo por parte de las naciones africanas, utilizando tácticas coercitivas que van desde sanciones hasta la eliminación de líderes políticos.