El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, reclamó a Occidente por “temer a Rusia” ante una escalada y pidió a los países occidentales, proporcionar el apoyo necesario, para atacar territorio de Rusia.
«Si el miedo a una escalada no fuera el principal factor que influyera en la decisión de los aliados, Ucrania estaría ahora en una posición mucho mejor y recibiría las armas necesarias mucho antes”, señaló Kuleba.
El diplomático ucraniano también acusó a los aliados de haber tomado decisiones basadas en el miedo a una escalada del conflicto, lo que retrasó el apoyo necesario para Ucrania y consideró que esta preocupación por la escalada había servido como excusa, para no actuar de manera decisiva.
Durante un evento en el Campus Polonia del Futuro, con la presencia del ministro de Exteriores de Polonia, Radosław Sikorski, y el ucraniano Kuleba como invitados especiales, este último comentó que las “dudas” de algunos socios internacionales sobre la capacidad de Ucrania para enfrentar la guerra afectaron negativamente el suministro de armas y recursos.
Por su parte, Radosław Sikorski sugirió que, en lugar de preocuparse por la reacción del presidente de Rusia, Vladimir Putin, los aliados deberían actuar de manera que “Putin se viera obligado a preocuparse por cómo defenderse” y mencionó el ataque ucraniano en la región de Kursk, como un ejemplo.
Unión Europea justifica ataques de Ucrania
Recientemente, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, acusó la Unión Europea de “justificar” los ataques de Ucrania en la región de Kursk.
Puedes leer: Rusia denuncia a EEUU y UE de incitar a Ucrania para atacar Kursk
“Las declaraciones, tanto de Borrell (jefe de la diplomacia europea), como de los representantes del Pentágono, no son sino una justificación de los crímenes de Kiev e incitación a cometerlos. O sea, son el patrocinio del terrorismo”, detalló la diplomática rusa.
Te puede interesar: Francia y su deuda histórica con Haití
Por otro lado, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, señaló que permitir a Kiev utilizar armas occidentales en sus ataques a Rusia podría haber “contribuido” a los esfuerzos por la paz, y prometió debatir con los ministros de Exteriores y Defensa, el aumento de la ayuda de paquetes bélicos, tras los ataques a la región de Kursk.