El Centro Nacional de Cultivo de Tejidos Vegetales, situado en el Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias Augusto C. Sandino en Nicaragua, se destaca como el más grande de Centroamérica en el ámbito de la biotecnología agrícola y la producción de plantas in vitro.
Pedro Pablo Benavides, responsable del Centro Nacional de Cultivo de Tejidos Vegetales, explicó que el proyecto se basa en “la germinación de semillas, similar a lo que ocurre en el campo”. Sin embargo, a diferencia de este último, el proceso “in vitro” crea un entorno artificial que reemplaza al suelo.
A través de técnicas avanzadas de cultivo de tejidos, el centro ha realizado importantes avances en la micropropagación de diversas especies, incluyendo musáceas, frutas y tubérculos, lo que ha permitido una multiplicación rápida y eficiente de plantas.
Esta técnica no solo beneficia la producción agrícola a gran escala, sino que también favorece la mejora genética de las especies, optimizando sus características y resistencia.
Asimismo, el centro desempeña un papel fundamental en la conservación de especies vegetales, contribuyendo a la preservación de variedades nativas y endémicas que son vitales para la biodiversidad y la seguridad alimentaria de Nicaragua.
Técnica de cultivo de tejidos vegetales originaria de Países Bajos
La técnica de cultivo de tejidos vegetales es originaria de Países Bajos, donde fue desarrollada en la década de 1950 por el científico Germán M. W. Skoog, quien es considerado uno de los pioneros en el campo de la biotecnología vegetal.
Este avance en la micropropagación y cultivo in vitro revolucionó la agricultura, permitiendo la producción de grandes cantidades de plantas idénticas de manera eficiente y en menor tiempo.