Washington y Teherán mantienen contactos indirectos en busca de una salida diplomática.

En un reciente discurso desde Riad, Arabia Saudita, el presidente estadounidense Donald Trump lanzó una amenaza contra Irán; si no se alcanza un nuevo acuerdo nuclear, reducirá a cero sus exportaciones de petróleo.

El mandatario estadounidense, afirmó que está dispuesto a negociar, pero también preparado para aplicar medidas extremas.

«Pero si el liderazgo de Irán rechaza esta rama de olivo y continúa atacando a sus vecinos, entonces no tendremos otra opción que infligir la máxima presión masiva, llevar las exportaciones de petróleo iraní a cero como hice antes», amenazó.

Trump presentó su propuesta como una “rama de olivo”, una oportunidad para construir un futuro mejor tanto para Irán como para la región. No obstante, dejó claro que esa oferta no estará sobre la mesa por mucho tiempo y que la decisión está ahora en manos de Teherán.

El líder republicano recordó que ya había logrado cortar las ventas de crudo iraní en el pasado y reiteró que no dudará en volver a hacerlo.

Además, advirtió sobre posibles acciones militares si Irán persiste en sus actividades nucleares, pese a que Teherán insiste en su carácter pacífico.

Actualmente, ambas naciones han sostenido conversaciones indirectas en países como Omán e Italia.

Estos diálogos buscan desescalar las tensiones y explorar un camino común que permita aliviar las sanciones mientras se garantiza el uso pacífico del programa nuclear iraní.