China, Rusia y Pakistán exigen alto el fuego inmediato ante escalada bélica.
China, Rusia y Pakistán exigen alto el fuego inmediato ante escalada bélica.

Durante una tensa sesión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, el embajador de Rusia, Vasili Nebenzia, denunció que el reciente ataque de Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares en Irán representa una amenaza global.

Acusó a Washington de actuar en complicidad con Israel y de arrastrar al mundo hacia un escenario de consecuencias imprevisibles. “EE.UU. ha abierto la caja de Pandora”, advirtió el diplomático, quien cuestionó la legitimidad y los motivos del bombardeo.

«Una vez más, nuestros colegas estadounidenses han ignorado la posición de toda la comunidad internacional, siguiendo el ejemplo de Israel en lugar de ponerlo en su lugar y obligarlo a detener la espiral de escalada. Hoy volveremos a escuchar las cínicas declaraciones de los representantes estadounidenses sobre su disposición a volver a las negociaciones, como si nunca hubiera habido una serie de ataques nocturnos con munición pesada contra Irán», denunció.

El representante ruso comparó esta ofensiva con la invasión a Irak en 2003, criticando la narrativa occidental y calificándola como una farsa destinada a justificar nuevas guerras.

Por su parte, Irán denunció la agresión como una flagrante violación del derecho internacional. El embajador Amir Saeid Iravani culpó directamente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de manipular la política exterior estadounidense para provocar un nuevo conflicto.

Iravani reiteró que Teherán se reserva el derecho de responder de manera proporcional y en el momento que considere adecuado, invocando su legítima defensa conforme a la Carta de la ONU.

«Una vez más, EE.UU. ha optado, imprudentemente, por sacrificar su propia seguridad meramente para salvaguardar a Netanyahu. Una vez más, el mundo ha sido testigo de la flagrante corrupción del sistema político estadounidense y sus líderes», afirmó, insistiendo en que Irán es una nación que busca la paz.

China condenó el ataque como una transgresión de la soberanía iraní y, junto a Rusia y Pakistán, presentó una propuesta ante el Consejo de Seguridad para exigir un cese inmediato de las hostilidades. El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó profunda preocupación y pidió evitar una escalada que podría derivar en un conflicto de gran magnitud.