Rusia llevó a cabo una demostración de su capacidad nuclear completa al ensayar su tríada estratégica, bajo la dirección del presidente, Vladímir Putin. El ejercicio incluyó pruebas con misiles balísticos intercontinentales, proyectiles lanzados desde submarinos y misiles de crucero aerotransportados.
Desde el cosmódromo de Plesetsk, las fuerzas estratégicas rusas lanzaron un misil Yars hacia el polígono de Kura, en Kamchatka.
Ejercicios militares rusos fueron exitosos
A su vez, el submarino nuclear Briansk, desplegado en el mar de Barents, disparó un misil balístico Sinevá. La operación también involucró bombarderos Tu-95MS, que lanzaron misiles de crucero durante el vuelo.
El Kremlin confirmó que todos los objetivos fueron alcanzados con éxito, el jefe del Kremlin supervisó el ejercicio desde el Centro Nacional de Control de Defensa, acompañado por altos mandos militares.
Según el comunicado oficial, se evaluó la preparación operativa del personal y la capacidad de mando ante un eventual conflicto nuclear.
Esta prueba reafirma la operatividad de la tríada nuclear rusa, un pilar central en su doctrina de disuasión en tiempos de creciente tensión internacional.
