
El presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó que Moscú nunca contempló la posibilidad de atacar a Europa y que está dispuesta a dejar este compromiso por escrito.
“Hay que llevarlo todo al lenguaje diplomático. Porque una cosa es decir de forma general que Rusia no tiene intención de atacar a Europa —lo que nos resulta gracioso, la verdad; nunca lo hemos planeado—, pero si ellos quieren escucharlo formalmente, bueno, podemos fijarlo”, manifestó el líder ruso.
Sus declaraciones surgieron al evaluar la necesidad de revisar y traducir al lenguaje diplomático las propuestas del plan de paz impulsado por Donald Trump. El mandatario indicó que la idea de una amenaza rusa hacia Europa carece de fundamento.
Putin añadió que algunos gobiernos europeos han utilizado el conflicto internacional para convencer a sus ciudadanos de que Rusia representa un peligro directo.
“No hay problema. Simplemente hay personas allí que, me parece, no están del todo en su sano juicio, o tal vez actúan de mala fe buscando algún beneficio. Públicamente le dicen a su población que Rusia se prepara para atacar Europa y que deben fortalecer urgentemente su potencial defensivo”, afirmó.
Además, el líder ruso calificó de exageradas y engañosas las advertencias que se difunden en varias capitales del bloque europeo.
Sostuvo que las autoridades occidentales han creado una percepción distorsionada de la realidad. De acuerdo con su versión, esta estrategia mantiene en tensión a la opinión pública sin motivos legítimos.
Putin reiteró que Rusia no tiene intención de involucrarse en un conflicto con Europa y que cualquier insinuación en sentido contrario es una invención.
Al insistir en que la postura del Kremlin es clara, invitó a las partes a centrarse en negociaciones reales y no en temores infundados. Concluyó que Moscú está lista para cooperar si se busca un diálogo serio y verificable.




