El Gobierno venezolano condenó el intento de ataque con drones dirigido contra una residencia oficial del presidente ruso, Vladímir Putin. En una declaración oficial difundida el 31 de diciembre, Caracas calificó el episodio como un acto criminal que vulnera normas básicas del derecho internacional y eleva las tensiones a nivel global.
El comunicado del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores sostuvo que ninguna motivación política, militar o estratégica puede legitimar agresiones contra líderes de Estados soberanos. En ese sentido, Venezuela reafirmó su respaldo a la soberanía rusa y advirtió que este tipo de acciones representan una amenaza directa para la estabilidad internacional.
Venezuela se solidariza con el pueblo ruso
La reacción venezolana se produjo tras la divulgación de información por parte del Ministerio de Defensa de Rusia, que detalló un operativo con 91 drones de largo alcance, lanzados desde territorio ucraniano. Según Moscú, todos los aparatos fueron neutralizados por los sistemas de defensa aérea antes de alcanzar la residencia presidencial en la región de Nóvgorod.
Caracas manifestó su solidaridad con el pueblo ruso y apoyó el derecho del Estado ruso a adoptar medidas legítimas para proteger a sus instituciones y a su población. Asimismo, instó a la comunidad internacional a condenar el terrorismo sin selectividad y a evitar enfoques que profundicen la confrontación geopolítica.
La postura oficial venezolana refuerza su vínculo estratégico con Moscú y su defensa de un orden internacional multipolar. El mensaje concluye con un llamado a priorizar soluciones políticas y diplomáticas, rechazando cualquier forma de injerencia o uso de la violencia como herramienta para dirimir conflictos entre Estados.
