El 23 de agosto de 1980, Nicaragua alcanzaba un hito que generó esperanzas en obreros y campesinos de una época marcada por la desigualdad en toda la región.
La gran Cruzada Nacional de Alfabetización, un logro de la Revolución Sandinista, donde miles de jóvenes se movilizaron voluntariamente a enseñar a leer y escribir a todo un pueblo.