Se espera que el fenómeno de El Niño se manifieste a mediados o finales de 2023, y los científicos están advirtiendo sobre sus posibles consecuencias.
Este fenómeno climático ocurre cada 3 a 7 años por el calentamiento del Océano Pacífico, provocando cambios en las corrientes oceánicas y atmosféricas que pueden causar inundaciones, sequías y cambios de temperatura en todo el mundo.
Además de los impactos económicos, podría haber daños significativos en la infraestructura y la agricultura debido a inundaciones y sequías.
Aunque el verdadero impacto de El Niño en cada región del planeta aún es desconocido, los pronósticos climáticos se están volviendo menos precisos debido al cambio climático inducido por el ser humano.