Al menos 12 personas murieron y 29 resultaron heridas, entre ellas dos agentes, tras un tiroteo ocurrido en la playa de Bondi, en Sídney.
Las autoridades declararon el hecho como un ataque terrorista y afirmaron que el hecho estuvo dirigido contra la comunidad judía durante una celebración de Janucá.
“A las 21:36 de esta noche declaré formalmente este hecho como un incidente terrorista”, afirmó el jefe policial Mal Lanyon en rueda de prensa, señalando que se activaron poderes especiales para garantizar la seguridad.
El ataque se registró en el parque Archer, junto a una de las playas más concurridas de Australia, donde se encontraban cerca de mil personas por el inicio de la festividad de Janucá.
Asimismo, las autoridades identificaron a dos presuntos agresores: uno murió tras ser abatido y otro permanece detenido, aunque no se descarta un tercer implicado.
Además, se localizó un supuesto artefacto explosivo improvisado, lo que motivó la intervención de un escuadrón antibombas.
Por su parte, el primer ministro Anthony Albanese lamentó las “escenas impactantes y angustiosas” procedentes de Bondi y confirmó la existencia de heridos.
