Los gobiernos de Nicaragua y China han dado un paso trascendental en las relaciones de cooperación estratégica, con la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) que amplía el intercambio económico y comercial entre Managua y Bejín.
En el contexto de un encuentro virtual, altos representantes gubernamentales de ambos países, suscribieron el nuevo Tratado de Libre Comercio, destacando la relevancia comercial e histórica que este implica.
Nicaragua destaca el nuevo Tratado de Libre Comercio con China
El asesor presidencial para la Promoción de Inversiones Comercio y Cooperación Internacional, Laureano Ortega, quien encabezó la comisión del país latinoamericano aseguró que se trata de un día histórico: “La Firma del Tratado de Libre Comercio entre Nicaragua y China marcará un antes y un después para el pueblo nicaragüense. Nos abre las puertas a un enorme mercado y nos permitirá enlazarnos con las empresas y empresarios de este país hermano”, enfatizó.
Ortega dio la bienvenida a las empresas y empresarios de la República Popular China; y aseguró que se les otorgarán todas las facilidades e incentivos que contemplan las leyes nicaragüenses para los inversores.
Asimismo, el representante nicaragüense, detalló que la envergadura del Tratado de Libre Comercio con el gigante asiático, implica el fortalecimiento del desarrollo en ambos territorios a través de nuevas inversiones, generación de empleo, adquisición de tecnología china, e incidirá en una mayor presencia nicaragüense en ese país.
Nicaragua, plataforma comercial en Centroamérica
“Nicaragua debe ser considerada por China como una plataforma comercial para toda la región centroamericana”, expresó Ortega, quien también reafirmó la importancia de solidificar las relaciones bilaterales, agradeciendo en representación del gobierno nicaragüense de Daniel Ortega y Rosario Murillo, “la atención tan especial” al mandatario, Xi Jinping.
El titular del Ministerio de Hacienda, Iván Acosta, quien formó parte de la delegación de Nicaragua, ilustró que, “hay grandes expectativas y grandes posibilidades de que el Tratado de Libre Comercio tenga impacto profundo en el desarrollo del país”; y en acelerar el crecimiento del tamaño de la economía en un momento en el que existe estabilidad macroeconómica, finanzas públicas sanas y la consolidación cambiaria.
China destaca importancia de TLC con Nicaragua
Por parte de la alta comitiva de la República Popular China, el encargado del Ministerio de Comercio, Wang Wentao, brindó detalles de la firma del Tratado, e hizo hincapié en la trascendencia que representa en las relaciones económicas comerciales.
“Alrededor del 60 % de las líneas arancelarias se eliminarán inmediatamente después de la entrada en vigor del TLC. El TLC China-Nicaragua es una importante iniciativa para implementar el consenso de los líderes de ambos países; que constituye un acontecimiento importante en la historia de las relaciones económicas comerciales”, precisó Wang Wentao.
Asimismo, aseguró que el TLC China-Nicaragua constituye un hito importante en la historia de las relaciones económicas y comerciales bilaterales; y agregó que cuando este entre en vigencia proporcionará mejores condiciones funcionales para los intercambios económicos y comerciales, consolidando de esta forma la cooperación bilateral.
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Según medios locales nicaragüense, el 91.4 % de los productos de la canasta exportadora del país centroamericano se encuentra disponible para ser exportado a China mediante el TLC; y refirieron que el titular de Comercio, Jesús Bermúdez, presente en la firma del Tratado, especificó que “el 71 % de esos productos estarán disponible; para exportarse a China al entrar en vigor el tratado y que se negociaron canastas que se van a degradar a 5 a 10 y a 15 años”.
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El histórico y amplio convenio asumido por Nicaragua y China, entrará en vigencia el 1 de enero de 2024, marcando un avance significativo en la cooperación económica y comercial de las naciones, que han respaldado y ratificado unas relaciones diplomáticas respetuosas a la soberanía y autodeterminación de los pueblos, ante la premisa de la construcción de un nuevo mundo multipolar.