El expresidente brasileño Jair Bolsonaro, fue obligado a portar un grillete electrónico por orden de la Corte Suprema, como parte de las medidas cautelares en la investigación por el intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023.
La Policía Federal de Brasil ejecutó una operación en su residencia ubicada en Brasilia, en cumplimiento de la orden del STF, donde se le instaló el dispositivo electrónico.
“El uso de tobillera electrónica es una máxima humillación, pero jamás pensé en abandonar el país”, declaró Bolsonaro, tras ser trasladado a la sede policial para la colocación del dispositivo.
El exmandatario no podrá salir de su domicilio entre las 19:00 y las 07:00 horas, usar redes sociales, ni acercarse a embajadas ni comunicarse con diplomáticos.
El Supremo Tribunal de Justicia de Brasil impuso nuevas medidas cautelares contra Jair Bolsonaro, acusado de participar en un intento de golpe de Estado. Entre ellas figuran el uso de tobillera electrónica y la prohibición de utilizar sus redes sociales. pic.twitter.com/FZu2QkAL8K
— JP+ (@jpmasespanol) July 18, 2025
La decisión también impide a Bolsonaro establecer contacto con otros investigados, incluyendo a sus hijos Carlos y Eduardo, además se extiende el arresto domiciliario a los fines de semana.
Las autoridades informaron que en el allanamiento se incautaron cerca de 14.000 dólares, según Bolsonaro alegó que “son dólares que declaré o serán declarados”.
Exmandatario enfrenta múltiples procesos judiciales
Desde que dejó el poder, Bolsonaro enfrenta varios procesos judiciales, entre ellos por su mala gestión de la pandemia, ataques al sistema electoral y por la insurrección de enero de 2023 promovida por sus seguidores.
Esta nueva fase judicial lo vincula directamente a un intento de golpe de Estado contra el presidente Lula da Silva.
La Policía Federal por orden del Supremo brasileño impuso tobillera electrónica, restringió salidas nocturnas y prohibió el uso de redes sociales del expresidente, Jair Bolsonaro, para evitar su fuga en medio del proceso judicial por el intento de golpe de Estado. pic.twitter.com/QPDOUDliMe
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En medio de la presión judicial, el presidente de EEUU, Donald Trump, salió en su defensa: calificó el proceso como una “caza de brujas” y amenazó con imponer aranceles del 50 % a las importaciones brasileñas si continúa el acoso a su aliado.
