La Covid-19 ha derrumbado familias enteras en El Salvador. Además de sobrellevar cifras récord, con una de las tasas más altas de médicos fallecidos en la región, el país centroamericano hoy también enfrenta la peor fase de la pandemia.
Entre cruces y lápidas, las familias salvadoreñas despiden a sus seres queridos, alzando su voz ante la administración actual, a la cual demandan por la falta de atención en los hospitales públicos y un colapso funerario que amanaza en agudizar la crisis.