La misión principal del renovado Departamento de Guerra de Estados Unidos es “librar la guerra, prepararse para la guerra” y ganar, declaró el secretario de la institución norteamericana, Pete Hegseth.
En una reunión con altos mandos militares en Quantico, Virginia, Hegseth enfatizó que la misión será llevada a cabo sin descanso ni concesiones.
En su discurso, Hegseth declaró que «la era del Departamento de Defensa ha terminado», y justificó el viraje estratégico citando a George Washington: “quien anhela la paz debe prepararse para la guerra”.
«No más división, distracción o delirios de género. Como he dicho antes y lo diré de nuevo: se acabó esta mierda», agregó Hegseth.
El relanzamiento del Departamento de Guerra ocurre en paralelo a una creciente militarización del Caribe, con una presencia naval que no se veía desde hace casi cuatro décadas.
Aunque Hegseth aseguró que Estados Unidos “ama la paz”, sus acciones apuntan a un endurecimiento sin matices de la política exterior.
Como parte de esta línea dura, también anunció recortes de generales y el despido de varios altos mandos. El golpe estructural ocurre además a las puertas de un posible cierre del gobierno.
En este sentido, el mandatario estadounidense, Donald Trump, lejos de mostrar preocupación, calificó la reunión como “muy agradable” y dijo que se hablaría de “lo bien que va todo” en materia militar.
