El columnista Max Boot, del diario The Washington Post, sostiene que China está ganando la guerra comercial iniciada por Estados Unidos.
En su análisis, destaca que el crecimiento del PIB chino alcanzó el 5,3 % en el primer semestre del año, frente al modesto 1,25 % registrado en EE.UU., lo que refleja una clara ventaja del país asiático en el plano económico.
Según Boot, Pekín no ha cedido a la presión arancelaria impuesta por la administración Trump, a diferencia de otros países.
De hecho, tras las represalias chinas, incluyendo la restricción de metales raros, Washington redujo los aranceles del 145 % al 30 %, mientras que China los bajó al 10 %, lo que debilitó la posición inicial de EE.UU. en las negociaciones.
Aunque Donald Trump ha presentado los acuerdos alcanzados como un triunfo histórico, el periodista advierte que se trata solo de una tregua temporal, sin avances reales en temas clave como la sobreproducción china o el robo de propiedad intelectual.
Además, la autorización reciente para exportar microchips de Nvidia a China sugiere un retroceso en la confrontación comercial.
Por último, el columnista subraya que, al intentar sancionar a la India por sus lazos con Rusia, EE.UU. pone en riesgo años de esfuerzos diplomáticos.
El acercamiento reciente entre Nueva Delhi y Pekín es una señal de que la guerra comercial, lejos de fortalecer a EE.UU., está debilitando su influencia global.