La decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo Plus (OPEP+), de recortar la producción de petróleo en dos millones de barriles por día (2 MB/D), ha presionado a Estados Unidos, obligándolo a recurrir a sus reservas de petróleo para amortiguar la crisis energética e inflacionaria del país.
En consecuencia, la Casa Blanca comunicó, que el Departamento de Energía de EEUU entregará al mercado otros 10 millones de barriles de la Reserva Estratégica de Petróleo a partir de noviembre.
Ante el alza de los costos del petróleo y sus derivados, producto de la medida de la OPEP+, el informe añade que Joe Biden, «continuará dirigiendo las liberaciones de SPR, para proteger a los consumidores estadounidenses y promover la seguridad energética», indica el informe.
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Además, se agrega que el presidente estadounidense, está preocupado por los efectos que provocaría la reducción de la producción a su país, también solicitó al sector petrolero continuar disminuyendo los precios de los combustibles.
El mandatario norteamericano se encuentra «decepcionado por la decisión miope» al mismo tiempo, que amenazó con gestionar ante el Congreso mecanismos de presión para «reducir el control» de la OPEP+ «sobre el precio de los energéticos», indica el informe de Washington.
Empresas petroleras pronostican un panorama nada alentador
El Instituto Americano del Petróleo (API) y los Fabricantes estadounidenses de combustibles y productos petroquímicos (AFPM), expusieron a través de un escrito que las limitaciones de las exportaciones de crudo en EEUU, podrían crear un panorama catastrófico que se podría para el sector petrolero estadounidense.
Según los representantes de las compañías, esto «limitaría la exportación de productos refinados», igualmente, disminuiría los niveles de inventario, reduciría la capacidad de refinación nacional, ocasionaría el alza de los precios del combustible para el consumidor y alejaría a los aliados de EEUU».
«Las limitaciones también podrían desalentar las inversiones necesarias en toda la cadena de suministro, así como reducir la capacidad de refinación nacional», aseguran API y el AFPM.
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Asimismo, las industrias, solicitaron al gobierno del país norteamericano, rechazar la «prohibición de exportación de productos refinados o restricciones a la exportación», indica la carta del consorcio petrolero.
Un proyecto que hundiría más a EEUU
Un grupo de senadores estadounidenses, propusieron un proyecto de Ley denominado «No a los cárteles productores y exportadores de petróleo» (NOPEC), el cual pretende ser un método para presionar a la OPEP+ y modificar la reconocida Ley Antimonopolio, que brinda «inmunidad soberana» a la alianza en el suministro de crudo en el interior y exterior del país.
Con la NOPEC, la Fiscalía General tendría la potestad para demandar a la alianza ante una entidad de justicia, sin embargo, en sus intentos de maniobrar y controlar los mercados, Washington, se hundiría en las lluvias de críticas y enfrentaría el rechazo por parte de los países compradores de crudo a la Organización de Países Exportadores de Petróleo Plus, explican expertos.
