Estados Unidos ejecutó un nuevo ataque letal en el Pacífico Oriental, provocando la muerte de tres personas que se suman a más de 80 fallecidos, por los bombardeos extrajudiciales, iniciados desde el 2 de septiembre.
Según la versión del Pentágono, las operaciones buscan “interrumpir el flujo de narcóticos hacia Estados Unidos”. El comunicado oficial describió la acción como un “ataque cinético letal”.
Este ataque se suma a 21 operaciones ejecutadas por fuerzas estadounidenses en apenas dos meses, en medio de la expansión militar de la Operación Lanza del Sur en el Caribe y el Pacífico.
Gobiernos y analistas advierten que el despliegue militar en el Caribe, amenaza la soberanía de Venezuela, bajo una narrativa “narcoterrorismo transnacional”.
Con cerca de 12.000 efectivos, un portaavión acompañado de destructores y aeronaves de combate, Washington realiza el mayor movimiento militar en décadas y avanza hacia una acción ofensiva que pone en riesgo la estabilidad de la región.
