En un hallazgo sin precedentes, un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Arizona ha documentado el primer caso de depredación de un marrajo sardinero (Lamna nasus) por parte de un gran tiburón blanco (Carcharodon carcharias).
Los investigadores pudieron rastrear el viaje migratorio de una hembra de marrajo sardinero, pero no anticiparon su trágico final: ser devorada por un tiburón de mayor tamaño.
Gracias a un dispositivo de seguimiento, los científicos pudieron rastrear a una hembra de marrajo sardinero preñada hasta el momento de su trágico final.
El dispositivo, ingerido por el depredador y posteriormente excretado, permitió determinar que el animal había sido devorado por un tiburón de mayor tamaño.
El marrajo sardinero, una especie en peligro
«Este es un hallazgo alarmante», afirma Brooke Anderson, autora principal del estudio. «Si este tipo de depredación es más común de lo que pensábamos, podría tener consecuencias devastadoras para la ya de por sí vulnerable población de marrajos sardineros».
Puedes leer: Estudio revela dónde se origina el amor y cómo se activa en el cuerpo
Los marrajos sardineros son tiburones de gran tamaño y crecimiento lento, lo que los hace especialmente vulnerables a la sobrepesca y otras amenazas. La pérdida de una hembra preñada representa una doble pérdida para la población, ya que elimina tanto a un individuo reproductor como a sus crías en desarrollo.
Te puede interesar: Viruela del mono: ¿A las puertas de una pandemia global?
Los investigadores señalan al gran tiburón blanco como el principal sospechoso de este ataque, aunque no descartan la posibilidad de que un marrajo común haya sido el responsable. Diversos datos recopilados durante el seguimiento apuntan al tiburón blanco como el depredador más probable.