El líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jameneí, afirmó que Teherán solo considerará cooperar con Estados Unidos si Washington abandona su respaldo militar y político a Israel, retira sus bases del Medio Oriente y deja de intervenir en los asuntos de la región.
“Solo en el caso de que Estados Unidos corte completamente su apoyo al maldito régimen sionista, retire sus bases militares de la región y deje de intervenir en sus asuntos, la solicitud de los estadounidenses para cooperar con Irán podrá ser considerada, no en un futuro cercano, sino más adelante”, declaró Jameneí durante un encuentro con jóvenes iraníes en Teherán.
El líder iraní calificó de “absurdo” pensar que la nación persa se rendirá ante la presión de Washington, subrayando que la rivalidad entre ambos países no es coyuntural, sino “esencial”.
“La arrogante naturaleza de Estados Unidos no acepta nada menos que la rendición”, señaló, acusando a la Casa Blanca de actuar como un “enemigo estructural” que utiliza sanciones, guerras indirectas y campañas mediáticas para socavar a Irán.
Jameneí sostuvo que las declaraciones recientes de funcionarios estadounidenses sobre una posible cooperación con Irán carecen de sentido mientras continúe el apoyo de Washington al régimen israelí y sus ataques en Gaza.
“Es incompatible hablar de cooperación mientras financian la agresión y el genocidio”, increpó.
Irán denuncia siete décadas de agresiones de EEUU
El ayatolá Jameneí recordó que la hostilidad entre Teherán y Washington se remonta al golpe de Estado del 19 de agosto de 1953, organizado por Estados Unidos y el Reino Unido contra el primer ministro Mohamad Mosadeq, quien nacionalizó la industria petrolera.
Aseguró que desde entonces “las conspiraciones y agresiones de EEUU han sido constantes”, citando la guerra impuesta por Irak, sanciones, sabotajes y el derribo de un avión civil iraní con 300 pasajeros.
“El conflicto con Estados Unidos no proviene de los eslóganes, sino de los intereses”, afirmó el líder, al tiempo que destacó que la solución para Irán radica en fortalecerse “militar, científica y espiritualmente” para mantener su independencia frente al imperialismo occidental.
