Amir Said Iravani, representante de Irán ante las Naciones Unidas, calificó el uso de fósforo blanco por parte de Israel en Gaza y el sur de Líbano como un «crimen de guerra».
En una intervención ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Iravani expresó su preocupación por la utilización de esta arma, prohibida por el derecho internacional, en ataques contra la población civil.
Según el diplomático iraní, estos actos son una grave violación de las normas humanitarias y un desprecio por los principios fundamentales de humanidad.
Iravani destacó la peligrosidad del fósforo blanco, conocido por sus efectos devastadores e incontrolables, y subrayó que su uso contra civiles es un crimen de guerra reconocido a nivel mundial.
A través de su intervención, instó al Consejo de Seguridad de la ONU a condenar de inmediato estas acciones y a iniciar una investigación exhaustiva bajo la supervisión de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
Más de 190 ataques con fósforo blanco generan alarma internacional
Desde el 8 de octubre de 2023, el ejército israelí ha lanzado más de 191 ataques con fósforo blanco contra áreas del sur de Líbano, según informes del investigador libanés Ahmad Baydoun.
Estos ataques se dirigieron principalmente a zonas designadas como «rojas» por las autoridades israelíes, áreas que fueron marcadas como prohibidas para la población local.
La situación ha generado gran preocupación por la seguridad de los civiles y el impacto a largo plazo en la habitabilidad de esas regiones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido sobre los efectos tóxicos del fósforo blanco, que puede causar la muerte en casos graves debido a insuficiencia renal, daño al sistema nervioso o choque circulatorio.
