La ofensiva militar israelí en la franja de gaza ha incorporado una nueva táctica de agresión: el uso de vehículos teledirigidos, conocidos como “robots suicidas”, cargados con hasta 12 toneladas de explosivos.
Estas unidades remotas, generan explosiones de gran magnitud para demoler edificios y abrir rutas, además, evitan exponer a las tropas, su implementación responde a recientes pérdidas militares, como la sufrida en Shujaiya, donde un blindado de la brigada Golani fue destruido.
Por su parte, la oficina de información en Gaza denunció que desde el 27 de mayo han muerto al menos 52 civiles y otros 340 han resultado heridos, muchos cerca de centros de distribución de ayuda.
En Rafah, tres personas fueron asesinadas este lunes, y otras 35 resultaron heridas, como parte de una estrategia de ataques sistemáticos que ya suman 93 días de hostilidades continuas.
Los países árabes acusan a Israel de usar el hambre en Gaza como arma de guerra, declaró el enviado de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed Abushahab. pic.twitter.com/mDaqILGN0f
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Lo medios locales confirmaron que, las explosiones controladas, han causado graves daños a la infraestructura civil, afectando especialmente el norte y centro del enclave.
En Jabalia, cuatro personas murieron por un ataque en el área de Faluya, mientras que en Zawaida fallecieron tres trabajadores municipales.
Además de las víctimas civiles, en Khan Yunis, las tropas israelíes destruyeron el muro del hospital europeo, intensificando el colapso del sistema sanitario.
Miles de palestinos irrumpieron en busca de alimentos en un centro de ayuda en Rafah, tras casi tres meses de bloqueo por parte de Israel. Según autoridades locales, el ejército israelí mató a tres personas e hirió a 46 durante el caos. pic.twitter.com/amn0oiYuOP
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Por otro lado, la UNRWA denunció que la ayuda continúa bloqueada, “estamos mirando cajas de comida aquí… algunas de ellas caducan en julio” detallaron mediante la red social X.