La decisión de Ruanda surge para salvaguardar sus intereses nacionales y dignidad de su pueblo.
La decisión de Ruanda surge para salvaguardar sus intereses nacionales y dignidad de su pueblo.

El Gobierno de Ruanda informó a  Bélgica su decisión de romper relaciones diplomáticas con efecto inmediato, esta medida surge tras una cuidadosa evaluación de varios factores relacionados con el conflicto en el este de la República Democrática del Congo.

Según el comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional ruandés, “todos los diplomáticos belgas en Ruanda deben abandonar el país en un plazo de 48 horas, y, de conformidad con la Convención de Viena, Ruanda garantizará la protección de las instalaciones, los bienes y los archivos de la misión diplomática belga en Kigali”.

Ruanda señaló que la medida salvaguarda sus intereses nacionales y la dignidad de su pueblo, así como de defender los principios de soberanía, paz y respeto mutuo.

La medida llega en un momento de creciente tensión debido a las acusaciones del Gobierno congoleño, que señala a Kigali como cómplice del grupo rebelde M23, que ha intensificado su ofensiva en la región.

Ruanda ha denunciado que Bélgica ha “debilitado sistemáticamente” al país africano y ha participado activamente en una campaña para socavar su acceso a la asistencia internacional.

En su comunicado, el Gobierno ruandés afirmó que “Bélgica ha tomado partido en un conflicto regional, utilizando mentiras y manipulación para generar una percepción hostil e injustificada sobre Ruanda”.