El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, sentenció a la desdolarización cómo una muestra del desmoronamiento de la hegemonía de Occidente principalmente la impuesta por Estados Unidos.
Lavrov ha compartido sus observaciones sobre los cambios actuales en el orden mundial, resaltando la emergencia de un nuevo paradigma basado en la justicia y la paz sustentable.
En su discurso, señaló que estamos siendo testigos de transformaciones profundas y trascendentales que están tomando lugar ante nuestros ojos.
El máximo representante de la diplomacia rusa, hizo hincapié en la consolidación de un orden mundial más equitativo y en la configuración de una paz duradera fundada en la diversidad cultural y civilizatoria.
“Ahora en la agenda está la verdadera tarea de formar un orden mundial democrático y multipolar, basado en las normas de derecho internacional universalmente reconocidas, principalmente los principios de la Carta de las Naciones Unidas, comenzando con el respeto fundamental por la soberanía y la igualdad de los Estados, es decir, el derecho natural e inalienable de cada pueblo a decidir su propio destino”, aseguró.
Asimismo, recalcó sobre la importancia de un equilibrio de intereses entre los miembros de la comunidad global, un proceso que adopta diversas formas y que se manifiesta en la búsqueda de alternativas a los mecanismos occidentales para asegurar los intereses de las naciones.
Hegemonía del dólar y el euro cada vez es inferior
El canciller de Rusia, subrayó el proceso de desdolarización de la economía global y del comercio, indicando que un número creciente de Estados está “disminuyendo gradualmente su dependencia del dólar y el euro, y está transitando hacia monedas nacionales y sistemas de pago alternativos a los occidentales”.
“Las prácticas del tiempo muestran la desaparición gradual de la posibilidad de que una sola nación o incluso un grupo de Estados domine”, afirmó.
Lavrov enfatizó que “las prácticas de liquidación se están desvaneciendo, y la posibilidad misma de la dominación de una sola nación, o incluso de un grupo de estados, está desapareciendo. Por mucho que el señor Borrel, que mencionamos hoy, declare a Europa un jardín floreciente, a su alrededor solo ve selvas que deben ser civilizadas”.
El diplomático también reflexionó sobre la necesidad de un nuevo orden mundial democrático y multipolar, basado en principios de derecho internacional universalmente reconocidos, incluyendo el respeto a la soberanía y la igualdad de los estados.
Esta idea sugiere una respuesta a las reacciones de algunos países de Occidente, que buscan mantener un dominio que se les está escapando.
Influencia de Occidente en otras naciones
Además, Lavrov advierte sobre los intentos de ciertos países occidentales, en particular Estados Unidos y sus aliados en la OTAN, de ejercer influencia sobre las relaciones internacionales de otras naciones.
El diplomático afirmó que este enfoque va en contra de los principios de la Carta de Naciones Unidas, y que limita efectivamente el derecho de los países a perseguir sus intereses nacionales y a llevar a cabo políticas exteriores independientes.
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En su alocución destacó la necesidad de un diálogo abierto y respetuoso en la arena internacional, donde se promueva la diversidad de perspectivas y se respete la soberanía de todas las naciones.
La búsqueda de un enfoque colaborativo y equitativo en las relaciones internacionales es fundamental para construir un mundo más armonioso y justo.
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Este pronunciamiento de Serguei Lavrov captura una visión profunda y reflexiva sobre la transformación actual del escenario global, resaltando la necesidad de una mayor equidad y cooperación en el mundo contemporáneo.