En la India, unas 280 personas fallecieron y 900 resultaron heridas, luego que dos trenes de pasajeros se descarrilaran y colisionaran contra un tren de carga, en la ciudad de Balasore, estado de Odisha.
Cientos de trabajadores de la salud, policías y bomberos, participaron en el rescate. Los servicios de emergencia trabajaron intensamente salvando a las personas que quedaron confinadas entre vagones.
Accidente ferroviario mortífero
El primer ministro indio, Nerenda Modi, expresó sus muestras de solidaridad con las víctimas del accidente, y aseguró que se está llevando una investigación para determinar las causas del descarrilamiento.
“En esta hora de dolor, mis pensamientos están con las familias en duelo. Todos estamos angustiados”, dijo Modi, quien además añadió que “se ha formado un comité de alto nivel que documentará el incidente, para realizar evaluaciones”.
De acuerdo a las investigaciones preliminares, los vagones de uno de los trenes, que cubría la ruta entre Calcuta y Chennai, se descarrilaron, ocupando inmediatamente la vía contraria e impactando contra otro tren de pasajeros y uno de mercancías.
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Durante la operación de búsqueda, salvamento y rescate, se utilizaron perros rastreadores y helicópteros de la fuerza aérea; así como unas 200 ambulancias y personal del ejército de esa nación.