El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó una nueva amenaza que reaviva la tensión en Medio Oriente: Israel podría reanudar sus ataques en Gaza “tan pronto como yo lo ordene” si, según él, Hamás no cumple con el acuerdo de alto al fuego.
En una breve llamada a CNN, el mandatario afirmó que ha tenido que “contener” al gobierno de Benjamín Netanyahu, aunque dejó claro que, si lo decide, dará luz verde para retomar la ofensiva militar.
Trump condicionó la tregua a la entrega de prisioneros, mientras evitó pronunciarse sobre las restricciones israelíes a la ayuda humanitaria que mantiene a miles de palestinos sin alimentos ni medicinas.
Israel, por su parte, continúa bloqueando el ingreso de suministros esenciales a la Franja de Gaza, permitiendo solo la mitad de los camiones de asistencia acordados y cerrando parcialmente el cruce de Rafah, bajo el argumento de que Hamás no ha entregado todos los cuerpos de prisioneros.
Esta medida, denuncian organizaciones internacionales, agrava la crisis humanitaria y demuestra la falta de compromiso del gobierno israelí con el proceso de la detención del genocidio en Gaza.