El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sostuvo conversaciones telefónicas por separado con sus homólogos de Rusia, Vladimir Putin, e Irán, Masoud Pezeshkian, en las que enfatizó la urgencia de una solución diplomática ante la creciente tensión entre Teherán y Tel Aviv.
Según un comunicado de Turquía, Erdogan afirmó las acciones de Israel representan una amenaza directa al orden internacional y podrían derivar en un conflicto a gran escala en Medio Oriente.
Erdogan destacó que Ankara ha priorizado históricamente el uso de mecanismos diplomáticos y reiteró que el diálogo es la única vía viable para reducir las tensiones actuales.
De igual manera, subrayó la necesidad urgente de retomar las negociaciones con Irán, especialmente en el ámbito nuclear, como paso esencial hacia la distensión.
El presidente turco también expresó su inquietud por el posible desvío de la atención internacional respecto a la crisis humanitaria en Gaza, debido al foco puesto en el conflicto de Israel contra Irán.
Putin, por su parte, coincidió con Erdogan en la importancia de frenar las hostilidades cuanto antes y crear condiciones favorables para reactivar la diplomacia.
En su conversación con el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, el presidente turco compartió los esfuerzos diplomáticos que ha llevado a cabo con diversos actores internacionales, reafirmando la disposición de su para actuar como intermediario y reiteró su compromiso con el restablecimiento de la paz en la región mediante un alto al fuego inmediato.
