El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, calificó de inaceptable la utilización de grupos terroristas, como Hayat Tahrir al Sham (HTS), para alcanzar objetivos geopolíticos en Siria.
Durante el Foro de Doha, Lavrov destacó que estas prácticas, que incluyen el apoyo a ofensivas desde la zona de distensión en Idlib, agravan la crisis en el país árabe.
Lavrov afirmó que Rusia continúa brindando apoyo militar al Ejército sirio para enfrentar los ataques de estas organizaciones extremistas.
Subrayó que el principal objetivo de Moscú es poner fin a las hostilidades y estabilizar la región, trabajando tanto con el Gobierno de Siria como con la oposición legítima.
El ministro también reveló que durante la reunión en el formato de Astaná, celebrada en Doha, Rusia acordó junto con Turquía e Irán realizar gestiones adicionales para involucrar a las fuerzas de oposición en negociaciones que permitan avanzar hacia la paz en Siria.
Grupos armados toman ciudades clave en Siria
La situación en el terreno ha escalado desde finales de noviembre, cuando Hayat Tahrir al Sham y grupos armados opositores lanzaron una ofensiva masiva en Alepo e Idlib, arrebatando al Ejército sirio varias posiciones clave.
Las ciudades de Alepo, Hama, Rastán y Talbise han caído en manos de estos grupos por primera vez en más de una década, lo que marca un grave retroceso para las fuerzas gubernamentales.
Ante este panorama, Lavrov reiteró el compromiso de Rusia con la integridad territorial de Siria y llamó a todas las partes implicadas a priorizar el diálogo y la paz en la región.