Rusia expresó su desacuerdo con la nueva resolución aprobada por la Junta de Gobernadores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), al considerar que el documento incrementa la presión política sobre Irán y afecta el trabajo técnico del organismo. El vicecanciller Serguéi Riabkov afirmó que la iniciativa impulsada por varios países europeos “no contribuye a la estabilidad ni al diálogo”.
“Estos días, estamos presenciando cómo en Viena… un grupo de países europeos ha adoptado un borrador carente de valor y destructivo”, señaló Riabkov, criticando que la postura occidental ignore argumentos de cooperación presentados por Teherán.
El diplomático destacó que, pese al contexto regional y a los ataques contra instalaciones iraníes, Irán continúa optando por la vía diplomática. “Apoyamos a Teherán en este camino. Creemos que es el único posible en las circunstancias actuales”, añadió.
La resolución, impulsada por Estados Unidos, Francia, el Reino Unido y Alemania, obtuvo 19 votos a favor y exige a Irán suspender actividades vinculadas al enriquecimiento y reportar información adicional sobre sus reservas de uranio. Rusia, China y Níger votaron en contra al considerar que el texto pasa por alto la cooperación existente entre Irán y la AIEA.
Teherán sostiene que la resolución ignora el origen de las tensiones actuales, marcado por acciones militares contra instalaciones bajo supervisión del organismo. Moscú, por su parte, insiste en que la única salida viable es mantener el diálogo y evitar medidas que profundicen la confrontación.
