La preocupación de la comunidad científica crece tras la reciente actualización de las previsiones sobre el asteroide 2024 YR4.
Tanto la NASA como la Agencia Espacial Europea (ESA) elevaron las probabilidades de impacto en la Tierra para diciembre de 2032.
Inicialmente, se calculaba un riesgo del 1,2 %, pero ahora las estimaciones ascienden a 1,8 % según la ESA y 1,9 % según la NASA.
El asteroide, con un tamaño estimado de entre 40 y 100 metros de diámetro, se encuentra bajo vigilancia.
La Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN), encargada de evaluar amenazas espaciales, fue activada para precisar su trayectoria.
Según los cálculos iniciales, una posible colisión podría afectar zonas del océano Pacífico oriental, el norte de Sudamérica, el Atlántico, África, el mar Arábigo y el sur de Asia.
Impacto potencial y efectos devastadores
Especialistas advierten que, de producirse el impacto, la energía liberada sería 200 veces superior a la bomba atómica de Hiroshima.
Javier Licandro, del Instituto de Astrofísica de Canarias, subrayó la magnitud destructiva del evento. Por su parte, el científico Rene Duffard, alertó sobre el riesgo de un megatsunami si el objeto cae en el mar.
Aunque las probabilidades de impacto siguen siendo bajas, la ESA recalca que podrían disminuir a cero con nuevas observaciones. No obstante, los expertos continúan evaluando estrategias de mitigación y respuesta en caso de que el riesgo persista.