La ciudad de Belén, ha decidido cancelar las celebraciones de Navidad por considerarlas inapropiadas, en el contexto en que Israel continúa bombardeando la Franja de Gaza, convirtiéndola en un cementerio de niños.
El alcalde de esa ciudad, Hanna Hanania, expresó que “el nacimiento de Jesús es un mensaje de esperanza para todos los niños del mundo”, por tanto, no pueden “celebrarlo cuando miles de niños están siendo asesinados en la Franja de Gaza”.
En este sentido, el edil manifestó que, como parte de la comunidad palestina, también las familias de Belén sufren profundamente los problemas que atraviesan las familias gazatíes.
“Musulmanes y cristianos hemos vivido codo con codo durante muchas décadas bajo la agresión de la ocupación, y juntos hacemos frente a nuestra vida cotidiana”, sostuvo Hanania.
Puedes leer: Más del 80 % de los niños en Gaza sufren pobreza alimentaria grave, advierte Unicef
Además, el alcalde indicó que unos mil cristianos de Gaza “están siendo brutalmente bombardeados y asesinados”. Tras el reciente ataque contra la iglesia de San Porfirio, fallecieron varios cristianos y musulmanes.
Te puede interesar: Gaza: una crisis humanitaria ignorada
El hecho que no se celebrará la Navidad en Belén, ha representado un duro golpe a la economía local. La ciudad, que para estas fechas recibía a miles de turistas, ahora luce totalmente desierta; no hay luces navideñas, ni decoraciones en la plaza del Pesebre.
