El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, afirmó que Occidente «no puede esperar» para «arrastrar» a su país a un enfrentamiento, en medio de las acusaciones de que Ucrania ha desplegado fuerzas adicionales en la frontera que comparten.
«Les garantizo que no permitiremos ningún enfrentamiento en la frontera con Ucrania, no habrá ninguno», apostilló Lukashenko, durante una reunión solemne con motivo del Día de la Independencia de Bielorrusia.
En un encuentro en Misk, capital bielorrusa, con el presidente de la Duma Estatal rusa, Viacheslav Volodin, Lukashenko destacó que Rusia y Bielorrusia enfrentan «muchos problemas comunes», relacionados con Ucrania y otros países occidentales.
Según el mandatario, Ucrania está intentando extender las tropas bielorrusas a lo largo de la frontera para dificultar la resistencia y escalar la tensión, «hasta un grado en que todo el mundo se estremezca», informó la agencia Belta.
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Recientemente, el Ministerio de Defensa de Bielorrusia detalló sobre movimientos inusuales en la frontera con Ucrania, incluyendo vuelos de reconocimiento y la acumulación de tropas en la región de Yitomir, a unos 100 kilómetros del territorio bielorruso. Por su parte, Ucrania negó tales acusaciones.
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Ante la movilización militar de Ucrania en la frontera, Minsk elevó al máximo nivel de alerta a su Fuerza Aérea y a la defensa antiaérea de Bielorrusia y Rusia, desplegando los sistemas de defensa antiaérea Polonez y los sistemas de misiles Iskander.
