El Alto Representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, realizó un llamado firme a la desescalada de las tensiones en torno a Taiwán, reiterando la postura de la UE de una sola China y excluyendo cualquier posibilidad de reconocer la independencia de Taiwán.
«Nuestra posición es clara: una sola China. No reconoceremos la independencia de Taiwán, pero mantendremos relaciones económicas y culturales con este territorio», apostilló Borrell.
En este sentido, Borrell recalcó la posición de larga data de la UE de no reconocer la independencia de Taiwán, enfatizando la importancia de mantener relaciones económicas y culturales con la isla sin otorgarle reconocimiento estatal.
«Seguimos insistiendo en la reducción de las tensiones, el respeto al statu quo y la exclusión de cualquier posibilidad de una solución militar al problema», afirmó Borrell en una entrevista reciente con la revista Foreign Policy.
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El alto representante europeo reiteró la importancia estratégica de Taiwán para la economía de la UE, particularmente en lo que respecta a la producción de semiconductores.
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Las declaraciones de Borrell se producen en un contexto de crecientes tensiones entre China y Taiwán, exacerbadas por las relaciones entre Estados Unidos y la isla, y la reciente venta de armas estadounidenses a Taiwán.
