La violencia policial, la discriminación y las muertes por armas de fuego, forman parte del esquema de violación sistemática de Derechos Humanos que sufren las personas en EE.UU., según lo detalló el portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Wang Wenbin, al momento que cuestionaba la posición de la nación norteamericana, cuando esta realiza señalamientos sobre la misma temática, pero contra otros países.
Wang manifestó que, los EE.UU. «no tienen derecho a señalar con el dedo a los Derechos Humanos en otros países», desacreditando una vez más y de manera contundente el doble rasero de la diplomacia estadounidense, sobre distintas situaciones a nivel internacional.
La realidad de los estadounidenses, es caótica. En menos de 4 meses del año 2022, más de 250 personas han sido asesinadas por las autoridades policiales, según el registro de Mapping Police Violence. En promedio entre 2013 y 2020, las fuerzas del orden asesinaron a 1,100 ciudadanos por cada año.
Sin embargo, los asesinatos y la violencia policial van más allá, esa misma fuente reveló que en 47 de las 50 ciudades más grande de EE.UU., las fuerzas de la policía, asesinan con mayor frecuencia a afroamericanos que a ciudadanos blancos. Asimismo, el informe detalla que, 98.3. % de los asesinatos entre 2013 y 2020 se encuentran impunes.
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El representante de China, también detalló que, EE.UU. es «el único país desarrollado en el que se producen tiroteos masivos cada año durante los últimos 20 años»; una situación que resulta alarmante para distintos organismos de derechos humanos a nivel global, pero en el que no se ha obtenido avances positivos.
En referencia a la discriminación, el diplomático también específico que, 93,7 % de los estadounidenses musulmanes sufren discriminación; el 81 % de los adultos estadounidenses de descendencia asiática consideran que la violencia contra ellos ha escalado; y los hispanos quienes conforman el 19 % de la población de EE.UU., cuentan únicamente con el 2 % de la riqueza de ese país.
China ha considerado que «EE.UU. se está convirtiendo en un país donde los derechos humanos son sistemáticamente violados”, y además aboga por que ese país enfrente directamente “sus propios y graves problemas de derechos humanos” y encuentre formas de abordar las causas profundas del deterioro de estos”.
