Durante su 78º período de sesiones, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha reunido a líderes de todo el mundo en un histórico encuentro que ha puesto de manifiesto el rechazo a la hegemonía impuesta por Occidente en el hemisferio.
Los líderes latinoamericanos han desempeñado un papel destacado en esta plataforma internacional. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha instado a la comunidad internacional a considerar un «nuevo contrato mundial», denunciando la creciente brecha entre las naciones desarrolladas y las que están en vías de desarrollo.
«Demandamos cambios en el sistema financiero mundial, porque es injusto, anacrónico y disfuncional», declaró el mandatario cubano. Además, Díaz-Canel condenó las sanciones y bloqueos impuestos por Estados Unidos a Venezuela, Nicaragua y Cuba, y presentó su candidatura para el próximo periodo del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, al tiempo que llamó a acciones concretas contra el cambio climático.
Bolivia subraya la construcción de un nuevo orden mundial
El presidente de Bolivia, Luis Arce, subrayó la importancia de la ONU en la construcción de un nuevo orden mundial. “Los desafíos pendientes siguen siendo numerosos y enormes, pero hoy nos encontramos ante el alba de una nueva configuración internacional”.
“Estamos convencidos que asistimos a la construcción de un nuevo Orden Mundial, situación en la que la Asamblea de las Naciones Unidas, siguiendo los principios por la que fue creada, debe jugar un rol principal», afirmó el mandatario boliviano.
Igualmente, Arce instó a poner fin a la carrera armamentista y a priorizar el diálogo y la diplomacia, enfatizando la necesidad de un esfuerzo colectivo con voces diversas.
Argentina critica la política neocolonial financiera de Occidente
El presidente argentino, Alberto Fernández, criticó al Fondo Monetario Internacional (FMI) por aplicar aumentos en los intereses y abogó por un cambio en el sistema financiero internacional. “El FMI no puede subir sus intereses cada vez que la Reserva Federal de Estados Unidos lo haga para controlar la inflación de su país”, manifestó Fernández.
Asimismo, destacó su apoyo al multilateralismo para encontrar soluciones a los problemas comunes y abogó por un sistema de comercio internacional de productos agrícolas más justo.
Brasil e Irán abogan por combatir las desigualdades
El presidente brasileño, Luis Inácio Lula da Silva, hizo un llamado a la “voluntad política”, para reducir las desigualdades y promover el diálogo para resolver conflictos internacionales. Lula subrayó la importancia de abordar el hambre como un tema central y destacó la necesidad de promover una cultura de paz en un mundo cada vez más desigual.
Asimismo, Lula, rechazó la política de ejecutar medidas coercitivas: “Las sanciones unilaterales causan un gran daño a la población de los países afectados; además de no alcanzar sus alegados objetivos, dificultan los procesos de mediación, prevención y resolución pacífica de conflictos”, precisó.
Por su parte, el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, criticó la hegemonía de Occidente como anacrónica y afirmó que “no se ajusta a las circunstancias actuales”.
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Raisi destacó el surgimiento de potencias emergentes: “Este orden mundial es más equitativo a favor de la integración regional, caracterizado por el abandono de la arrogancia global”, manifestó.
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La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas continúa siendo un foro crucial para el diálogo global y la búsqueda de soluciones a los desafíos que enfrenta el mundo en la actualidad.
