Waveline Magnet, un dispositivo que flota en el océano, podría salvarnos de la crisis energética, convirtiendo las olas en electricidad. Esto constituye una nueva alternativa sostenible con el medioambiente, con un costo menor del que aparenta.
Después de una década de desarrollo, la compañía Sea Wave Energy Limited (SWEL), presentó el diseño de un aparato que aprovecha el movimiento de las olas para producir niveles de energía, que podrían competir incluso con fuentes de recursos no renovables.
El ingenioso aparato, se compone de muchas plataformas flotantes conectadas, que simulan la forma de una columna vertebral, creando flexibilidad en el dispositivo que puede seguir el movimiento de las olas sin problemas.
Debido a su tecnología modular, puede trabajar en cualquier entorno de olas y ofrecer energía a bajo costo por su fácil reparación, mantenimiento, producción y transporte. Además de su fabricación a partir de materiales reciclados.
Energía renovable de las olas
Las olas tienen la mayor densidad de energía entre todas las fuentes renovables, muy por encima de la eólica, solar o la geotérmica.
Para muchos científicos, la energía a nivel mundial podría satisfacerse con la desarrollada por las olas oceánicas, si estas se llegaran a aprovechar por completo.
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Países desarrollados como China, Dinamarca, Italia, Portugal, España, Reino Unido y los Estados Unidos, están poniendo a prueba, y desarrollando estas nuevas tecnologías que apuntan a tener gran importancia en el ámbito energético.
Entre los sistemas utilizados, hay unos por debajo de la superficie del agua, otros anclados al fondo del océano, una técnica donde el agua pasa por un canal angosto como si fuera una presa, mientras empuja unas turbinas; y el último modelo presentado por SWEL, con paneles flotantes.
