La compañía tecnológica Google actualizó sus directrices sobre el uso de inteligencia artificial (IA), eliminando una cláusula que impedía su uso en el desarrollo de armamento.
Anteriormente, la empresa limitaba el uso de IA en tecnologías que pudieran causar daños generalizados, incluyendo armas. Ahora, la compañía ha abierto la puerta a aplicaciones militares.
En su blog, Google defendió que “las democracias deben liderar el desarrollo de la IA para impulsar el crecimiento global y fortalecer la seguridad nacional”.
Sin embargo, este cambio ha generado críticas, especialmente de expertos en ética de IA, como Margaret Mitchell, quien advirtió que «Google probablemente trabajará ahora en el despliegue directo de una tecnología que puede matar a personas», enfatizó Mitchell.
🛜Google eliminó la cláusula en sus directrices que restringía el uso de inteligencia artificial en el desarrollo de armamento. Esta modificación ha generado preocupación entre expertos en ética, quienes advierten sobre los riesgos de su implementación en tecnologías letales. pic.twitter.com/Q7PeychK7O
— JP+ (@jpmasespanol) February 5, 2025
Creciente competencia global en IA
Este ajuste de las políticas ocurre en medio de una creciente competencia internacional en el campo de la inteligencia artificial. El reciente lanzamiento del modelo DeepSeek de código abierto por parte de China, mucho más económico que ChatGPT, ha intensificado esta carrera tecnológica.
La eliminación de esta cláusula refleja la tensión entre el avance tecnológico y las preocupaciones éticas. A medida que las potencias tecnológicas compiten por la supremacía en IA, surgen cuestionamientos sobre el impacto en la seguridad global.
