En el contexto del decimoctavo aniversario de conformación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), sus máximos representantes plantearon los logros alcanzados y los desafíos que demanda la actual realidad política y económica en la región.
El evento se llevó a cabo en el Palacio de las Convenciones de La Habana, Cuba; en consonancia con la Sexta Sesión Extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
En este encuentro, los líderes de los países integrantes, reafirmaron su compromiso con el proyecto inaugurado por los líderes revolucionarios Fidel Castro y Hugo Chávez, que buscaban la paz y unidad entre los pueblos del continente americano.
“Durante estos 18 años el ALBA-TCP ha contribuido a acciones conjuntas con impactos positivos en nuestros pueblos con el desarrollo en materia de salud pública, la educación, energía, entre otros”, destacó para inaugurar la sesión, el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, Esteban Lazo Hernández.
Nicolás Maduro: “Tenemos que estar unidos para la acción”
En marco a la Cumbre celebrada por los representantes del ALBA-TCP, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, recordó durante su intervención, la creación de este proyecto en diciembre de 2004, como “una alternativa al ALCA, una alternativa al neoliberalismo”, levantando una serie de cambios “progresistas y técnicos en nuestro continente”.
“Cuba y Venezuela unimos nuestras dos Revoluciones, nuestros pueblos, nuestras dos capacidades para decirles a América Latina y El Caribe hay que marchar juntos, hay que construir y enlazar todas las fuerzas de un continente heroico que ha librado tantas gestas durante siglos por su igualdad, por su liberación, por su independencia, por su emancipación definitiva”, exhortó el mandatario venezolano, que hacía el llamado a la unidad entre las naciones.
Maduro, destacó que a casi 2 décadas de la constitución del ALBA-TCP, “hoy estamos aquí los Gobiernos y los pueblos que somos la vanguardia progresista y revolucionaria de la América Latina y caribeña”, añadiendo que esta unión debes estar dirigida en los principios liberadores y necesidades de los pueblos; “el ALBA a 18 años pica y se extiende y seguirá siendo la fuerza de vanguardia moral”, concluyó el jefe de estado bolivariano.
Bolivia: La injerencia extranjera sigue siendo la principal amenaza
Durante su participación, el presidente de Bolivia, Luis Alberto Arce, agradeció en nombre de los bolivianos el inicio de “una poderosa revolución, democrática y cultural” que abrió una nueva etapa en Bolivia, como un efecto de “ese desprendimiento, esa solidaridad, ese sacrificio, ese internacionalismo revolucionario” caracterizado como los principios básicos del ALBA-TCP.
De igual manera, destacó “el acompañamiento incondicional del estado plurinacional de Bolivia, al pueblo y al Gobierno cubano, en todas sus luchas y en todas sus conquistas, las cuales las asumimos como propias”.
“Este año ha significado un complejo escenario para Cuba, particularmente debido al recrudecimiento del criminal bloqueo que se mantiene desde la década de los años 60 […], pese a ello resiste y avanza, y no ha dejado ni un solo momento de brindar su solidaridad al resto de las naciones de la región y del mundo”, señaló.
Arce, añadió que “la injerencia extranjera, la inestabilidad política y el irrespeto a la voluntad de las mayorías continúan siendo las principales amenazas que se abalanzan sobre la región”.
Al respecto, el presidente boliviano, recalcó la importancia de avanzar en revolución cultural para fortalecer la conciencia social de “mujeres y hombres libres, y su orgullo por las raíces originarias indígenas y afroamericanas […]. Sigamos construyendo, desde el poder popular, ese mundo mejor que demandó Fidel en 2003, convencidos no sólo de que es posible, sino que es más necesario que nunca”, finalizó Arce.
Daniel Ortega: La ONU solo imponen decisiones de las potencias imperialistas
El mandatario de la República de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, dio inicio a su espacio durante esta Cumbre, elogiando la histórica revolución cubana que “se ha ganado el respeto del mundo, incluyendo el del pueblo norteamericano”, recordando la solidaridad presentada por el país caribeño durante los tiempos de guerra, en los años 80, “acompañando a nuestro pueblo y a nuestra juventud, que enfrentaba una vez más la agresión del imperialismo yanqui”.
En este contexto, el líder nicaragüense, denunció que el “imperialismo yanqui ha intervenido directamente en Nicaragua, desde el siglo antepasado, desde los años 1856, se producía la primera batalla en Nicaragua, donde eran derrotados los expansionistas yanquis […] Ahí está la naturaleza del imperio, que no ha desaparecido. Mientras tengamos imperios, tendremos esas manifestaciones imperialistas”.
Del mismo modo, Ortega, reiteró que la fundación del ALBA-TCP, significa “un momento histórico en el que se encuentran Fidel y Chávez, aquí en la Habana”, que dio como resultado una unidad entre países hermanos en la que continúan presente porque “los sentimos en nuestras venas, en nuestros corazones, los sentimos en nuestra conciencia. Ellos nos dan la fortaleza y más firmeza para continuar librando la batalla frente al imperialismo agresor”, expresó.
El mandatario nicaragüense, destacó que “fue con el empuje del ALBA, que se produce el milagro que los pueblos latinoamericanos decidamos de una vez por todas empezar a hacer realidad el sueño de Bolivar en la CELAC, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños”, enmarcando que aún es necesario abrir espacios porque “quedan batallas gigantescas”.
Con respecto a las Naciones Unidas, el jefe de Estado, detalló que “el gran reto que tenemos ahora en el mundo es la refundación de las Naciones Unidas, bajo el principio de la multipolaridad”, como una oportunidad para crear un nuevo mundo donde se establezcan principios que se puedan cumplir.
“La mayor muestra de la falta de vergüenza de las Naciones Unidas, la falta de vergüenza del secretario de las Naciones Unidas, es que cuántas veces se ha votado, mayoritariamente para que se suspendan las sanciones en Cuba, el 98 %, el 99% de votos a favor. Pero no pasa nada, y más bien recrudecen las sanciones en contra del pueblo de Cuba”, expresó Daniel Ortega, reconociendo que, a pesar del bloqueo, la nación caribeña “es un pueblo heroico, consciente y valiente” que está librando una batalla que amerita de una “inmensa solidaridad y una mayor presión dentro de Naciones Unidas, para que se cumpla lo que se vota. Sino, qué sentido tiene estar en las Naciones Unidas, si ahí solo se imponen las decisiones de las potencias colonialistas e imperialistas” concluyó el presidente de Nicaragua.
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Miguel Díaz-Canel: El imperialismo ha acelerado su acoso a candidatos de izquierda
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, recordó la creación del mecanismo ALBA como una organización que “no solo puede dar prueba de su necesidad, sino también de su valor como mecanismo de integración, al unir voluntades alrededor de la solidaridad, la complementariedad y la cooperación”.
“El ALBA fue el bloque de integración regional que más rápido mostró resultados concretos de beneficio para sus pueblos de todos los bloques que existen en el mundo”, destacó.
Díaz-Canel, subrayó que América Latina y el Caribe atraviesa un sinnúmero de problemas que ha como resultado “luchas sociales y populares para buscar satisfacer las demandas ciudadanas de transformaciones profundas y urgentes de las políticas precedentes que llevaron a grandes masas a la incertidumbre”.
Con respecto a estos avances, “el imperialismo y sus aliados han acelerado el acoso a candidatos de izquierda, conducen y estimulan procesos judiciales políticamente motivados contra estos”, señalando el caso de la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández.
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A su vez, el presidente cubano, señaló que “el imperialismo y las oligarquías” continúan haciendo uso de la desinformación y la manipulación de “la realidad latinoamericana”, para apoyar a políticos y candidatos de orientación fascista.
En este contexto, Díaz-Canel, indicó que los Estados Unidos “ahora intentan limitar la soberanía y, como siempre, imponer el dominio sobre nuestros destinos”, haciendo que el impulso hacia la integración y la cooperación que promueve el ALBA-TCP, sea más necesario.
Agradeció el apoyo por parte de los 185 Estados del mundo que luchan en contra del bloqueo impuesto por los Estados Unidos, reiteró su apoyo al presidente Nicolás Maduro Moros y a la Unión Cívico Militar que Lidera; y rechazó enérgicamente “los ataques y medidas coercitivas contra Nicaragua”.
Para concluir, el presidente caribeño, detalló que los países miembros del ALBA, “tienen mucho que compartir en la construcción de una ruta económica y social propia y beneficiosa para todos”, añadiendo que 2023 será un año de luchas y esperanzas, pero “de nosotros depende que sea también un año de avances y de victorias. Con el tesón, la perseverancia y la creatividad natural de nuestros pueblos singulares y resistentes”.
