Félix Rubén García Sarmiento, conocido mundialmente como Rubén Darío, hace 108 años, un 6 de febrero, falleció en la ciudad de León, Nicaragua, a la edad de 49 años, dejando un legado imborrable en la literatura hispanoamericana.
Nacido el 18 de enero de 1867 en San Pedro de Metapa, hoy Ciudad Darío, Rubén mostró desde temprana edad una inclinación hacia el arte literario, influenciado por diversas obras y autores, que despertaron su pasión por la escritura.
Legado literario
A lo largo de su vida, Darío viajó por varios países de América Latina, expandiendo sus horizontes y dejando huella en la literatura de la región. Trabajó como periodista en prestigiosos medios como La Nación en Argentina, donde entabló una estrecha relación con Bartolomé Mitre.
Entre sus obras más destacadas se encuentran «Azul», «Abrojos», «Prosas Profanas y otros poemas», «Tierras Solares», «Los Raros» y «El Canto Errante», que lo consagraron como uno de los máximos exponentes del Modernismo literario en lengua castellana.
En este sentido, su estilo se caracterizaba por el cromatismo, el romanticismo, la sonoridad y el ritmo, explorando temas que iban desde lo exótico hasta lo patriótico.
En septiembre de 2023, la Casa Museo Archivo Rubén Darío de Nicaragua, ubicada en la ciudad de León, fue reconocida e incorporada en el Programa Memoria del Mundo de la UNESCO, un honor que perpetúa la memoria y la obra del ilustre escritor.
En este museo se conservan valiosas ediciones originales de las obras de Rubén Darío, así como documentos y manuscritos que revelan su genio creativo.
Puedes leer: JP+ estrena documental sobre el Teatro Nacional Rubén Darío
Además, el museo cuenta con una biblioteca que alberga más de 2,500 volúmenes, incluyendo las obras del propio Darío y de otros destacados escritores nicaragüenses e hispanoamericanos.
Te puede interesar: El Huipil: Folklore, tradición e identidad nicaragüense
El legado de Rubén Darío perdura en la literatura universal, inspirando a generaciones de escritores y lectores en todo el mundo, y su contribución al patrimonio cultural de América Latina sigue siendo invaluable.