Tras dos años de la denuncia realizada por Nicaragua contra la Carta Democrática de la Organización de los Estados Americanos (OEA), oficialmente se ha retirado del organismo regional al que considera infame y un instrumento de injerencia de Washington.
“Nos retiramos definitivamente, Nicaragua ya no tiene ninguna relación, ya no somos miembros de ese infame organismo llamado OEA”, aseguró el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, en un pronunciamiento oficial.
En ese sentido, el gobierno nicaragüense, a través del diplomático, argumentó: “Este 19 de noviembre de 2023, se cumplieron dos años en que el Gobierno de Nicaragua denunció la Carta de la Organización de los Estados Americanos (OEA), y conforme a su Artículo 143 ya esa Carta queda sin efecto alguno con relación al Estado” nicaragüense.
Moncada, también reiteró la crítica en contra de la OEA, señalando que este organismo se alinea a los intereses políticos de Estados Unidos, respaldando un sinnúmero de acciones que violan el derecho internacional.
Nicaragua, su pueblo y su gobierno “quedan desligados, desvinculados de esa Organización injerencista, instrumento de intervención del Gobierno unipolar y hegemónico decadente de los Estados Unidos de Norteamérica”.
Nicaragua acusa a la OEA de injerencia en Latinoamérica
En ese mismo tono, el representante nicaragüense advirtió que “la OEA continúa siendo el ministerio de colonias diseñado y organizado por el Poder norteamericano para encubrir y justificar sus acciones agresivas, violatorias del derecho internacional contra los pueblos y gobiernos progresistas y revolucionarios de América Latina y el Caribe”.
En este sentido, Nicaragua menciona distintos hechos de trascendencia histórica en América Latina, de lo que considera un recurrente patrón de injerencismo de la OEA en los asuntos internos de los países de la región, y promovido por los distintos gobiernos estadounidenses.
“La OEA ha tenido de manera reiterada una actuación injerencista en contra de Nicaragua, transgrediendo los principios de no intervención en los asuntos internos, el respeto a la soberanía de los Estados y el derecho de los pueblos a elegir libremente su destino, principios reconocidos por el Derecho Internacional y contenidos en su Carta constitutiva” denunció Moncada.
Asimismo, agregó que esa acción intervencionista de la Organización de los Estados Americanos, quedó evoidenciada con “su involucramiento y actuación parcializada en el fallido golpe de Estado del 2018 en Nicaragua”.
“La falsedad de los informes electorales de la OEA, fue la punta de lanza para el golpe de Estado en Bolivia y el derrocamiento del presidente, Evo Morales. Un crimen antipopular por el cual tienen que responder el secretario general y otros funcionarios de la OEA, igual que otros crímenes en este hemisferio”, sostuvo el representante nicaragüense.
Asimismo, Moncada señaló que “en el año 2016, la Cámara de Diputados de Brasil realiza un ilegal juicio político contra la presidenta, Dilma Rousseff, a quien destituyen y luego persiguen judicialmente; y encarcelan al expresidente Lula. Con injerencia de Estados Unidos judicializan la política para dar golpe de Estado, utilizando su llamado y ficticio Estado de Derecho”.
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Además, Nicaragua enfatizó en su contribución al debilitamiento del hegemonismo unipolar occidental, fortaleciendo la multipolaridad en un mundo justo y equitativo, al concluir con el proceso de salir de la OEA.
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El Gobierno de Nicaragua destacó en el contexto de su retiro oficial del organismo internacional, que el pueblo nicaragüense “continúa su proceso revolucionario de patria libre, digna, soberana y siempre Más Allá”.
