El hambre en el mundo, incrementó significativamente en 2021, y afecta a más de 45 millones de niños, plantea un reciente informe elaborado por cinco agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Hambre en el mundo aumenta escalonadamente
De acuerdo al reporte, unos 828 millones de personas padecieron hambre en 2021; lo que supone un aumento de unos 46 millones, desde 2020, debido a las consecuencias de la pandemia y la crisis climática.
Mientras la cifra incrementa hasta los 2,300 millones de personas con dificultades graves o moderadas, para obtener alimentos.
En este sentido, el informe de la ONU, precisa que “el estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo, pinta un panorama sombrío”.
Por otra parte, advierte que el número de personas que no pueden permitirse una dieta saludable en todo el mundo, aumentó en 112 millones más que en 2019, hasta casi 3,100 millones, en 2020.
Puedes leer: Nicaragua y las claves de su seguridad alimentaria
El economista jefe de la FAO, Máximo Torrero, alertó que también la pobreza extrema se ha agudizado sustancialmente, y se ha perdido cerca de una década de avances en la reducción de la misma.
“También hemos visto que la desigualdad está subiendo. Y, por supuesto, todos los indicadores sobre nutrición no van por buen camino”, añadió el funcionario.
Se estima que 45 millones de niños menores de cinco años, padecían emaciación, la forma más mortífera de malnutrición, ampliando hasta 12 veces el riesgo de mortalidad infantil.
Las proyecciones son poco alentadoras. Se prevé que casi 670 millones de personas (un 8 % de la población mundial) seguirán pasando hambre en 2030, pese a tener en cuenta una futura recuperación económica.
El informe, fue elaborado conjuntamente por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).