Vladímir Putin, depositó flores en el monumento a Kuzma Minin y Dmitry Pozharsky, ubicado en la Plaza Roja de Moscú.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, depositó flores en el monumento a Kuzma Minin y Dmitry Pozharsky, ubicado en la Plaza Roja de Moscú, como un gesto simbólico, para honrar sus memorias, donde destacó la importancia de la unidad nacional y el patriotismo en la identidad rusa.

“Los padres y familiares cercanos de algunos de los chicos (presentes) participan en la operación especial militar de Rusia. Todos los que estamos aquí los ayudamos y apoyamos, y todos estamos unidos por nuestro objetivo común: la victoria”, enfatizó Putin durante su discurso.

El Día de la Unidad Nacional se celebra el 4 de noviembre en Rusia, para conmemorar la victoria de estos patriotas rusos, que simbolizó la importancia de la unidad del pueblo euroasiático.

“A la ceremonia tradicional asistieron representantes de confesiones religiosas, así como miembros de organizaciones públicas y juveniles, incluido el Cuerpo de Rescate de Estudiantes de toda Rusia”, mencionó el comunicado del Kremlin.

Asimismo, el Kremlin resaltó la asistencia de “la Fundación Defensores de la Patria, el Comité de Familias de Soldados de la Patria, la Asociación de Los Veteranos del Distrito Militar del Norte, el Frente Popular Panruso, el movimiento del Ejército Juvenil, el centro “Vympel”, el Movimiento de Búsqueda de Rusia, la comunidad “Movimiento del Primero”.

Liberación de Moscú ante los invasores de 1612

Dmitry Pozharsky, un noble y comandante militar, y Kuzma Minin, un comerciante y líder cívico, fueron figuras claves en la liberación de Moscú de los invasores polaco-lituanos en 1612.

Su liderazgo inspiró la formación de una milicia popular durante el período conocido como el «Tiempo de Problemas» en Rusia, cuando el país atravesaba una grave crisis política y social. Gracias a sus esfuerzos, lograron reunir y organizar a la población para expulsar a los invasores y restaurar el orden, consolidándose como héroes nacionales.