En medio de las recientes y devastadoras inundaciones que han golpeado al sur de Brasil, los equipos de rescate locales lograron con éxito rescatar a «Caramelo», un caballo que quedó atrapado debido a las condiciones climáticas extremas.
Los equipos de rescate se acercaron al caballo en una embarcación y lo aseguraron a bordo tras avistarlo en el techo de una casa inundada. Dado su peso de 350 kilos, el animal requirió ser sedado para ser transportado en una barcaza inflable. La operación contó con la colaboración de cuatro barcos inflables adicionales y cuatro embarcaciones convencionales.
La imagen del caballo se hizo viral en redes sociales, ya que quedó inmovilizado, sin acceso a comida y expuesto a las inclemencias del mal tiempo durante al menos 24 horas. Este evento se convirtió en un símbolo de las devastadoras inundaciones que han afectado al estado de Rio Grande do Sul en Brasil con particular ferocidad.
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El presidente de Brasil, Lula da Silva comentó «no puedo imaginar qué estaría pensando ese caballo en ese tiempo que estuvo en el tejado», expresando la preocupación y el deseo de que el animal tenga un merecido descanso tras la experiencia.
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Las inundaciones en el sur de Brasil han cobrado la vida de 108 personas hasta el momento. Además, las operaciones de rescate en la capital afectada, Porto Alegre, se suspendieron temporalmente debido a las nuevas lluvias.