Autoexiliados nicaragüenses regresan a su país e ingresan sin ninguna dificultad, sin embargo, instan a otros ciudadanos en el autoexilio a no volver, argumentando que Nicaragua no cuenta con las condiciones para que ellos retornen a su lugar de origen.
En este sentido, los autoexiliados más reconocidos y de clase económica influyente en el territorio nicaragüense, mantienen un doble discurso al pretender que otros ciudadanos no retornen a Nicaragua, mientras ellos se reúnen con sus familiares.