Rusia anunció que obtuvo más información en la que se involucra a Estados Unidos y el Reino Unido en los daños estructurales de los gasoductos de Nord Stream, ubicados en Alemania.
“El SVR de Rusia no deja de recopilar la información sobre las circunstancias de la serie de explosiones en el mar Báltico del 26 de septiembre de 2022. Aparecen nuevos datos que confirman la tesis ya expresada por el director del Servicio, Serguéi Narishkin, sobre la implicación de los anglosajones en los incidentes mencionados”, detalló el comunicado del Servicio de Inteligencia Exterior (SVR).
Según la inteligencia rusa, Estados Unidos y el Reino Unido lanzaron una campaña de desinformación para «ocultar el verdadero objetivo del sabotaje y a sus responsables».
En concreto el SVR señala que, desde agosto de 2024, los medios y organizaciones bajo el control de ambos países han difundido «una versión falsa que atribuye los atentados exclusivamente a extremistas ucranianos que operan de manera independiente».
En septiembre de 2022, tras el inicio del conflicto ruso-ucraniano, el gasoducto fue detonado por «personas desconocidas», las cuales tenían por objetivo provocar daños en el Nord Stream, que se extiende entre Rusia y Alemania por el Mar Báltico.
Según la inteligencia rusa, los ataques a los gasoductos son calificados como «un acto de terrorismo internacional y una guerra económica por parte de los anglosajones contra sus aliados europeos, en particular Alemania».
Tras los ataques al Nord Stream 1, la economía europea enfrentó varios desafíos cruciales para el suministro de gas natural, provocaron un aumento en los precios de la energía y generaron incertidumbre en el mercado de los hidrocarburos.
Plan terrorista aprobado por Estados Unidos
El gasoducto fue concebido en 2005, cuando Alemania y Rusia firmaron un acuerdo para su construcción y Nord Stream AG se fundó en 2006. La construcción del Nord Stream 1 comenzó en 2010 y se completó en 2012, con un coste de 7.4 mil millones de euros, asegurando el suministro de gas a Europa por al menos 50 años.
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Según una investigación de la revista alemana Spiegel, la operación para volar los gasoductos fue realizada por un grupo de buceadores civiles de Ucrania, liderados por el exagente de los servicios especiales Román Chervinski.
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Por otro lado, se señaló que el presidente Joe Biden autorizó el sabotaje luego de extensas discusiones con su equipo de seguridad nacional, quienes finalmente terminaron aprobando el ataque.