Los Estados miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) rechazaron y condenaron “la extensión por parte de los Estados Unidos de “un año adicional de la orden ejecutiva 13851 de 2018” en contra de Nicaragua.
“La Alianza Bolivariana denuncia ante el mundo el ataque continuado de la élite gobernante de Washington contra la hermana República de Nicaragua… irrespetando la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, incluyendo el derecho a la autodeterminación del pueblo de Sandino y el principio de no injerencia en los asuntos internos”, destacó el comunicado emitido por el organismo latinoamericano.
Asimismo, los integrantes del ALBA-TCP advirtieron que estas “decisiones arbitrarias y medidas coercitivas unilaterales” imponen “una verdadera amenaza inusual, ilegal y cada vez más ordinaria contra la paz y el derecho al desarrollo de Nicaragua y de decenas de países”, añadió.
‼️ ALBA-TCP rechazó la extensión de la orden ejecutiva 13851 de EEUU contra Nicaragua, calificándola de absurda y tendenciosa. La alianza condenó que se considere al país latinoamericano como "una amenaza" para la seguridad y la política exterior de Washington. pic.twitter.com/gt3NfimxjK
— JP+ (@jpmasespanol) November 25, 2024
Los Estados miembros del ALBA-TCP, subrayaron la ironía de la contradicción que radica bajo el argumento de que Nicaragua constituye “una amenaza inusual y extraordinaria, para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos”.
El ALBA-TCP, develó las intenciones de Washington, tras el prolongamiento “injerencista” a través de la Orden Ejecutiva, la cual consiste en “promover un cambio de gobierno de manera inconstitucional y por la fuerza” en el país latinoamericano.
Venezuela expresa “su solidaridad” con Nicaragua
Por su parte, Venezuela manifestó “su solidaridad con el pueblo y gobierno de la República de Nicaragua”, ante el inminente rechazo “de la infame orden ejecutiva” que utiliza como pretexto y que pretende someter “al pueblo nicaragüense a las criminales medidas” que “ocultan el intervencionismo imperialista”.
“Con esta orden ejecutiva, Estados Unidos muestra una vez más su desprecio por el derecho internacional y su insaciable sed de desestabilizar a gobiernos que defienden su soberanía y su dignidad”, mencionó el comunicado difundido por el gobierno venezolano.